FESTIVIDAD DE SAN PRUDENCIO
¡Hola niños y
niñas! Se acercan unas fechas muy importantes para Albelda. ¿Sabéis cuáles?
Siiiii, las
fiestas de San Prudencio.
Hay dos cosas muy típicas en estas fiestas, una quizás
ya la conocéis son los bollos de San Prudencio y otra los caracoles.
No sé si habéis oído hablar de…
El bollo de San Prudencio en Albelda de Iregua.
Pues que sepáis, que antiguamente los pueblos hacían
una romería cada año el 28 de Abril, día de San Prudencio, para comer unos
panecillos que daban los frailes del Convento-Monasterio a los romeros. Esta
costumbre la seguían manteniendo los niños, sobretodo en la primera mitad del
siglo XX, subiendo al cerro “Las Bolas” con estos sabrosos bollos, hechos de
leche, huevos, harina, mantequilla, azúcar y limón. Después se sumó todo el
vecindario y con gaita, zurracapote y bailables lo celebraban.
Y tenían esta
pinta ¡Ummmmm!
Este año las
fiestas son diferentes, pero igual de importantes. Así que os animo a
celebrarlas desde vuestras casas en familia.
Caracoles de San
Prudencio
Como hemos dicho se acerca la festividad de San Prudencio y los caracoles son un elemento tradicional. Hay muchas opciones para entretener a nuestros niños y niñas haciendo caracoles con distintos materiales.
La más sencilla puede ser hacer
caracoles con plastilina y
palillos y un poco más laboriosa con pasta de sal. También podemos
utilizar cartulina y
crear un divertido caracol. Con goma eva, dos alfileres y un palito tenemos la posibilidad de crear este
animal de forma muy llamativa. Distintas opciones para hacer una manualidad con
nuestros niños y niñas con la excusa de San Prudencio.
¡ENCONTREMOS AL CARACOL!
Os propongo
un juego en familia. Es sencillo y divertido para los peques.
¿Alguna vez habéis
ido a coger caracoles? Antes, nuestros mayores, si había llovido por la tarde iban a
coger caracoles de noche, con una linterna y una buena bolsa para coger cuantos
más mejor.
El juego consiste en esconder por varios rincones de la casa
caracoles hechos de papel, plastilina o de cualquier material del que
dispongáis. Con las estancias de la casa lo más oscuras posible, los niños, previstos de una
linterna y una bolsa, deberán encontrar los caracoles que previamente hayáis
colocado. Lo divertido será encontrar
todos los caracoles. Pasarán un rato entretenido.
Y recordad…
Los mejores caracoles son los que
se cogen en abril, porque, como dice el refrán: “los caracoles de abril, para
mí; los de mayo para mi amo, y los de junio para ninguno”.
¡Felices fiestas de San Prudencio!
¡Felices fiestas de San Prudencio!
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